el poder de la entraga

Mujer sustentable de pies a cabeza

Ojos grandes y expresivos que no temen humedecerse cuando les gana la emoción; pasión en cada una de sus palabras, gran elocuencia, ideas innovadoras y una claridad mental capaz de movilizar a toda una comunidad e inspirar a todo aquel que la escucha, son sólo algunas de las cualidades que hacen de doña Sofía Aristeo Serdán, la líder del proyecto Familia Rural Sustentable en Chiteje de Garabato, Querétaro.

Septiembre de 2007 fue la fecha que marcó el inicio de la transformación de Chiteje de Garabato en una comunidad sustentable. Para lograrlo, sus habitantes contaron con la colaboración, inversión y asesoría de organizaciones de la sociedad civil e instituciones gubernamentales que a lo largo de 4 años han trabajado con pasión para implementar una serie de ecotecnias en las viviendas de estas familias queretanas.“Doña Sofi”, como respetuosamente la llaman sus vecinos y visitantes, comenta que su situación ha cambiado radicalmente con el uso de las ecotecnias, impactando en su calidad de vida, mentalidad, salud, interacción con el medio ambiente e incluso, en la relación con su familia.

Sofía está convencida de que la pobreza no existe, la clave está en saber aprovechar proyectos e iniciativas como ésta, para aprender a valernos por nosotros mismos sin necesidad de estar recurriendo a los apoyos temporales que no resuelven los problemas de fondo.

“Aprendí que somos pobres de mentalidad, porque ahora sé que sí podemos comer todos los días, darle alimento a nuestros hijos, evitar problemas de salud y trabajar como familia para salir adelante con nuestros propios medios”, señaló doña Sofi.

Entre las principales ecotecnias aplicadas en Chiteje destacan la estufa ahorradora de leña, calentador y olla solares, letrina seca, techo de ferrocemento, cisterna y biofiltro; así como la implementación de huertos e invernaderos.

La higiene y el orden también son parte fundamental de este proyecto, por eso las viviendas participantes siguen los principios de “ordenamiento”, el cual pone cada cosa en su lugar, para que la casa luzca limpia y bien organizada.

A casi cinco años de distancia de recibir este proyecto en Chiteje de Garabato, sus habitantes se sienten satisfechos de haber transformado sus vidas con el uso de las ecotecnias, las cuales les han permitido acceder a un mejor nivel de vida.

“Lo que en un principio vimos sólo como un apoyo para construcción, nos ha dado muchos más beneficios, hoy tenemos una cultura ambiental, económica y social”, concluyó la líder del proyecto.

El esfuerzo de doña Sofía y del grupo de Promotores de Chiteje de Garabato fue reconocido con el Premio Estatal de Ecología 2011; sin embargo, aceptan que aún queda mucho trabajo por hacer en las comunidades de Amealco, y lejos de conformarse, se están preparando para ir por el Premio Nacional.